Archivo de la categoría: Utilidades

Mi mochila para un trekking

Líneas y líneas se han escrito sobre como hacer una mochila. Que si de 7 kilos, que si de 15. Que si el saco va aquí. Que si esto no va a hacer falta pero lo llevo «por si acaso…».

Cuanto daño ha hecho esa coletilla de «…por si acaso…». En fin.

Siempre me hago esta pregunta una vez tengo la «primera versión» de mi mochila: «¿Me vale para una semana? ¿Si?, pues entonces me vale para un mes». Es lo único que me pregunto.

Mi mochila «tipo» para un trekking de una semana o un mes es la siguiente:

– Botas de trekking. Zapatillas para la noche (o en caso de que se hayan mojado las botas) y algo para bañarse (chanclas). Dependiendo del trekking puedo optar por otro par de zapatillas en lugar de las botas, pero no suele ser lo común. (Ahora, eso que he visto de llevar botas de caña alta, otras de media caña y dos pares de zapatillas a un trek…tiene tela)

– Un pantalón de trekking para la ruta diaria (semiimpermeable) y otro para cambiarme cuando llego al refugio. Un bañador (que aprovecho para utilizarlo también de pantalón corto). Pantalón de agua a menos que está escandalosamente claro que no va a llover.

– Dos o tres camisetas transpirables. Suelo llevar una camiseta de esas que les tienes cariño para  dormir.  Y algo de ropa térmica si voy a un posible sitio-miseria.

– Dos o tres pares de calcetines y de ropa interior.

– Una chaqueta impermeable seguro. Aquí juego un poco y dependiendo de donde vaya añado una chaqueta de plumas de peso y tamaño reducido.

– Un abrigo ligero (forro o chaleco) que sirva también para resguardarse de los cambios de temperatura.

– Un saco de dormir o sábana. Con el saco hay mucho tema también, que si temperatura confort, extrema, etc etc. Para mi lo fundamental es el peso (el mio pesa 870 gramos y a -5 se está muy bien). Además aún se puede dormir con ropa en el saco, ¿no?. Es que escucho a la gente decir que pasa frío con su saco…y duerme en ropa interior. También está la posibilidad de la botella caliente en los pies…

– Frontal, Braga o pañuelo, guantes, gorro, gafas de sol, navaja multiusos, cantimplora y paraguas (rara vez). Toalla de secado rápido. Cubremochila. Bastones.

– Otras utilidades: jabón (en pastilla). Unas cuantas pinzas y un trozo de cuerda que no pese mucho para colgar la ropa u otras tareas logísticas.  Pastillas potabilizadoras. Pueden ser muy útiles en ciertos sitios.

– Minibotiquin: betadine, tiritas, venda, paracetamol…y dependiendo de donde vaya algo más específico. Hay que incluir aquí la protección para piel. Una chorrada más: si viajas en avión asegúrate del tipo de bote que llevas si no quieres que la presión haga de las suyas y te encuentres una sorpresa al llegar al destino. Que me lo ha dicho un amigo y eso…

– Cacharrería electrónica a gusto del consumidor. En mi caso, auriculares, cámara de fotos y móvil con sus respectivos cargadores. Pilas para el frontal.

Otras cositas que llevo:

– Mini placa solar para recargar el teléfono móvil. Cuesta 30 euros y no pesa casi nada. Cuando viajas a ciertos países te puede venir muy bien.

– 4 o 5 bolsitas de esas que se utilizan para congelar productos. Viene muy bien para aislar y organizar las prendas de ropa en la mochila.

Un último detalle: si viajo en avión, llevo una funda para la mochila (siempre hay algún sitio donde dejarla antes de iniciar el trekking). El que diseñó las cintas de los aeropuertos no viajaba mucho con mochila. Además intento minimizar los sustos relacionados con los hurtos y esas cosas.

Intento que el peso esté como máximo en los 8-9 kg ya que a eso hay que añadirle comida y agua…

Cuando finalizo el viaje y regreso a casa miro que cosas no he utilizado…y pienso en el paseo que les he dado para nada. Para la siguiente se quedan en casa.

Estas navidades tengo previsto salir, será un buen momento para repasar esta lista.